El diseñador de muebles Eero Koivisto es toda una figura en el diseño del siglo XXI. Sus muebles son racionales e inteligentes, prácticos e intemporales, y muestran un agradable sentido del humor. Sobre estas líneas podéis ver una composición de su sofá Orbit, y digo una porque este mueble permite muchas posibilidades.
El sofá Orbit no es una pieza con una forma preestablecida que hay que encajar en el espacio. Es un conjunto de partes que forman un todo, y este todo puede ser creado por nosotros combinando las piezas como si de un mecano se tratase.
El diseño de este mueble fue concebido como un ejercicio de fluidez. De esta manera, el diseñador consiguió una forma que parece estar fluyendo constantemente, y en la que el respaldo surge del asiento o donde las partes se juntan con otras creando diferentes combinaciones. Este sofá puede crear curvas y figuras de zigzag, de forma que con él se generan infinitas posibilidades destinadas a charlar, descansar, reunirnos con los amigos… Lo que nos apetezca.
El sofá Orbit es parte del sistema combinable Orbit, que cuenta con silla, sofá, banco y esquinero. Su estructura está realizada en madera contrachapada, y el tapizado de los asientos y respaldos es de espuma. Las patas son sencillos tubos de acero cromado, destinados a pasar lo más inadvertidas posible y ceder todo el protagonismo a la llamativa presencia de los asientos y los respaldos. Orbit se puede adquirir en el color rojo de la foto, pero también en turquesa, verde, naranja, gris…
Quizás la única pega que le encuentro a este sofá es que solo puede lucir toda su belleza en un salón muy grande… Pero para eso están los diseños más lujosos: para soñar con ellos.