Junto al sofá, la cama es el mueble más importante del hogar. Esta pieza de mobiliario debe proporcionarnos un descanso cómodo y placentero para que podamos rendir al máximo cada día y estar más saludables. Por eso, a la hora de escogerla debemos dar prioridad al confort en lugar de a otros factores, como el estilo o la originalidad. Eso sí, debes saber que en el mercado hay diseños que son confortables a la par que originales y estéticamente atractivos.
Un buen ejemplo de lo que te acabamos de contar lo encontramos en la cama Blancket, un diseño en el que los componentes se han invertido, por lo que la manta se ha transformado de simple accesorios a estrella absoluta. ¿Quieres descubrir más detalles? ¡Pues te recomendamos que estés muy atento!
Una cama cómoda en términos de percepción
Tal y como explica Alessandro Busana, el artífice de esta original pieza, “la cama es un objeto con el que interactuamos durante un período prolongado de tiempo con todo nuestro cuerpo”. Por eso, su objetivo no era solo hacerla cómoda materialmente, sino en términos de percepción. De ahí que escogiera una manta, con todo lo que representa en el imaginario colectivo, como elemento estrella.
La manta soporta el colchón
Como podrás comprobar tú mismo echándole un vistazo a las imágenes que te mostramos en nuestra galería, una manta grande y suave sustituye a la base de la cama, soportando el colchón. La manta se pliega en el extremo superior para formar el reposacabezas.
Un papel protagonista
La naturaleza casi arquetípica de este concepto hace de Blancket una cama iconográfica que inmediatamente destaca y que es capaz de desempeñar un papel protagonista, despertando emociones a través de una manta enrollada sencilla pero extraordinaria. A continuación te dejamos con nuestra galería, donde encontrarás más imágenes de esta original cama. ¡No te lo pierdas!