Los bebés crecen muy deprisa. A veces tanto que, cuando tú crees que dormirá todavía mucho tiempo en su cuna, de repente te das cuenta de que ya necesita una cama. Si tu pequeña está dejando de ser un bebé, seguro que necesitarás cambiar un poco su habitación.
Y ahí es donde quería ir a parar. Hoy quiero enseñarte un proyecto que me ha gustado mucho. Se trata de renovar una mesilla de noche para la habitación de una niña, empleando la técnica del decoupage. ¡Fíjate en el resultado!
Más fácil imposible
Lo increíble de este proyecto de DIY es que no importa en absoluto que no seas muy hábil con el pincel, ni tampoco que no se te de bien el bricolaje. La técnica es tan sencilla y agradecida que, una vez la pruebes, corres el riesgo de no poder parar y de llenar tu casa de decoupages.
La mesilla, antes, estaba pintada en un color oscuro y apagado. Lo primero que había que hacer era decaparla completamente para eliminar cualquier rastro de pintura anterior. Una vez hecho esto, se aplicó una mano de imprimación y dos capas de pintura blanca brillante en spray, y después otras dos capas de un sellador, también en spray.
Un trabajo creativo
Llegados a este punto, te diré que puedes utilizar cualquier otro motivo decorativo, en lugar de mariposas. ¡Dale rienda suelta a tu imaginación! Hacerte con las fotos será tan sencillo como descargarlas de Google Images, imprimirlas y recortarlas con cuidado (mueve el papel en lugar de la tijera y podrás recortar con más detalle).
Una vez hayas decidido dónde poner cada foto, pon un poco de pegamento especial para decoupage en el reverso de la mariposa, pégala en el mueble y aplica de nuevo una capa de pegamento sobre ella. ¡Y listo! Esa es toda la complicación de este proyecto. Si tu mueble tiene curvas, adapta las mariposas con los dedos. Por último, conviene dar una buena capa de barniz de poliuretano (mejor uno para aplicar con brocha; protege más y mejor que en spray).