Lo retro está más de moda que nunca. Aunque en algunos casos se conozca a esta tendencia con el nombre anglosajón de vintage, en todo caso estamos hablando de lo mismo: objetos que tienen ya algunas décadas (años 50, 50, 60, 70 e incluso 80 y 90) o que se inspiran en el diseño de aquellos años, recuperados para decorar ambientes contemporáneos. Dentro de la tendencia vintage, el cuero viejo llega con toda la fuerza para crear su propio estilo en decoración.
Y como ejemplo, los muebles de Firefly House: auténticas piezas de mediados del siglo XX que aportan personalidad, elegancia y encanto retro a las casas.
Además de ser preciosos, estos muebles (casi siempre se trata de sillones, sillas, sofas o butacas) son una inversión, ya que prácticamente se consideran antigüedades y además fueron diseñados por creadores de prestigio. La silla PK22, que podéis ver en la foto, fue creada a finales de los años 50 por Poul Kjaerholm for E.Kold.Christiensen, lo que la convierte en una pieza de coleccionista. Sencilla, racional y elegante, es el típico ejemplo de mueble por el que no pasa el tiempo, y que gana con los años.
La colección de Firefly House también incluye otras magníficas piezas de cuero vintage, como sofás de cuero negro o la silla Barcelona, diseñada para el Pabellón de Alemania de la Exposición Internacional de Barcelona celebrada en 1929. Se trata de una creación que habla por sí sola, al haber sido diseñada por Mies Van der Rohe y su compañera, la arquitecta Lily Reich. ¿A que os resulta familiar? Acompañada de su reposapiés y tapizada en un elegante cuero con capitoné incluido, esta silla es a día de hoy todo un icono de la modernidad. Si queréis tener alguna de estas piezas de coleccionista en vuestra casa, podéis echar un vistazo a la página web de Firefly House.