A veces, después de ver cientos de diseños y modelos de muebles y encontrar algunos que te gustan y otros que no, de repente descubres uno que te emociona. Aunque no sepas por qué, ese diseño te “llega” y después ya no se te olvidará. Es lo que me ha pasado con la cómoda C1, una espectacular pieza de mobiliario creada por Marcus Friesl y que despliega una elegancia sin igual.
Además de elegante, este mueble es arriesgado. Sus formas plenamente futuristas rompen con cualquier diseño conocido, y sin embargo la cómoda C1 es también levemente nostálgica, como una vieja amiga a la que vemos después de muchos años y que se muestra esplendorosa… pero cambiada.
Dos metros de cajón
La C1 basa su diseño en una carcasa realizada con una fina chapa de metal, modelada de forma que sujeta los cajones superiores e inferiores. La chapa se combina con un sistema estructural oculto en el cajón, que permite extraerlo en toda su longitud (¡más de dos metros!) sin ningún tipo de apoyo. Da la sensación de que el cajón flota liviano en el espacio, creando una forma moderna, técnicamente impecable y llena de personalidad.
Artesanía y tecnología para un diseño 10
Estas cómodas, de fabricación canadiense, se realizan mediante la intervención de prestigiosos artesanos de la madera y al mismo tiempo incluyen una tecnología innovadora, que permiten crear el acabado y el encaje de las piezas. Está disponible con acabado en madera y metal, dependiendo del gusto del cliente. Las dimensiones del mueble también se pueden personalizar para que la cómoda C1 se adapte a la perfección a todos los ambientes, luciendo su magnífico diseño intemporal durante toda una vida. Esta pieza es sin duda un mueble que se transmitirá de padres a hijos, y que por muchos años que pasen seguirá siendo el protagonista de cualquier espacio.