La primera vez que vi los relojes de Steve Cambronne tuve la sensación de que los conocía de hace tiempo. Ese peculiar estilo lleno de color, con formas caprichosamente escogidas y combinadas con todo cuidado, me recordaban sin duda a los logotipos y los diseños de los años setenta. Y aún más: yendo más atrás en el tiempo, descubría reminiscencias de grandes artistas de vanguardia como Alexander Calder y sus célebres móviles, o el escultor Brancusi, sin ir más lejos.
Y es que estos relojes son sin duda auténticas esculturas, algunos de inspiración más bien retro, y otros, como el propio artista comenta en su página web, de estilo “googie”.
Los relojes de Steve Cambronne son ideales para decorar un salón u otra estancia con un toque artístico y diferente. Llenos de color y con diseños curiosamente intemporales, nunca pasan de moda y se adaptan igualmente a ambientes de tipo vintage, industrial, contemporáneo o retro. Yo los veo en una gran pared blanca, junto a un sofá en tono neutro (gris, por ejemplo) y una estantería de estilo industria, recta y fabricada en acero cromado. Su combinación de formas y colores los convierte en absoluto centro de atención en cualquier ambiente, y por lo tanto hay que darles el protagonismo que se merecen.
Steve Cambronne es un escultor y artesano del metal que reside en Estados Unidos, y con sus relojes ha revolucionado el mundo de la decoración. Los modelos son auténticas esculturas que, además, decoran y dan la hora; y por un precio que oscila entre los 275 y los 375 dólares podemos llevarnos a casa uno de los muchísimos diseños que aparecen en la web del creador estadounidense. Según sus propias palabras, estos relojes están inspirados en las creaciones de los artesanos de mediados del siglo XX, y de ahí su estilo retro que nos resulta tanfamiliar. ¿Estáis pensando en quedaros con uno? Pues lo podréis encontrar muchos modelos en la página web de Steve Cambronne.