Debido a la crisis y al éxito que en los últimos años está teniendo la decoración vintage, cada vez hay más gente que apuesta por reutilizar y reciclar antiguas piezas de mobiliario para alargar su vida útil y, así, no tener que comprar nuevos muebles. Una buena idea para renovar el mobiliario y lograr que parezca otro es forrarlo de papel pintado, que no solo es adecuado para paredes.
Así, podrás aprovechar el papel pintado para forrar los interiores de los armarios, la cara interna de las puertas, la cara frontal de cajones y puertas, el fondo de una estantería, el asiento de una banqueta… Si te gusta la idea, te recomendamos que no te pierdas nada de lo que te contamos a continuación, ya que hoy vamos a contarte cómo forrar muebles con papel pintado. ¿Nos acompañas?
Medir, lijar y limpiar
Forrar muebles con papel pintado es mucho más fácil de lo que puede parecer. De hecho, ni siquiera necesitarás muchos productos. Así, lo primero que te recomendamos es que recortes el papel pintado a la medida. A continuación, deberás lijar la zona del mueble en la que vas a colocar el papel pintado que, preferiblemente, deberá estar pensado para muebles. Por supuesto, tras lijar deberás limpiar el polvo.
Colocar las tiras de papel
El siguiente paso será colocar cola para empapelar en la superficie, para lo que necesitarás una brocha. A continuación, deberás colocar las tiras de papel y, con la ayuda de una espátula, alisar la zona a medida que vas pegando. Para terminar, solo tendrás que coger un cúter y cortar los sobrantes de las esquinas.
Lo mejor de todo es que podrás aplicar esta técnica en todo tipo de muebles aunque, como te hemos comentado antes, es mejor que elijas papel pintado específico para muebles.